Contabilidad
Si te dedicas a gestionar una organización empresarial ya sea como socio, gerente o directivo, te voy a pedir que por un momento pienses en que le pedirías a un asesor financiero, del que quieres conocer sus servicios para contratarlo. Seguramente vuestra conversación se iría directamente a ¿Cuánto dinero voy a poder ganar o ahorrar siguiendo tus consejos? y es lógico que como último responsable de las finanzas de tu empresa, la conversación empiece por este punto.
Aquí, tienes que tener en cuenta un detalle muy importante, para que un asesor pueda llegar a darte esa respuesta de manera fiable, primero necesitará realizarte algunas preguntas, conocer los proyectos de la empresa, cuales son tus objetivos de negocio y conocer al máximo los detalles económicos de tu empresa, para diseñar muy bien la propuesta de asesoramiento financiero y ofrecerte las mejores opciones. Por este motivo, los asesores suelen quedarse bastante tiempo trabajando para una misma empresa, ya que llegan a conocer hasta el más mínimo detalle, y así llegan a ofrecer un servicio verdaderamente útil a la empresa.
Claro, pero llegados a este punto, debes plantearte que tipo de conversaciones tienes con tu actual asesor y si van en el camino correcto para el crecimiento financiero (En términos de rentabilidad) de tu organización. Quizás las indicaciones de este artículo te puedan ayudar a decidir si tu asesor es adecuado para tu empresa o por el contrario debes cambiarlo por otro que esté más alineado con tus objetivos de negocio.
Planificación financiera para tu empresa
En cuanto a la planificación financiera sería muy interesante realizar una proyección del negocio a dos años vista, pensando en el corto plazo, y otra proyección financiera pensando «Qué queremos ser de mayores» o dicho de otra manera, debemos de tratar de proyectar nuestro negocio a 10 años y 20 años vista, para adquirir un poco más de perspectiva, también financiera y que nuestro asesor pueda empezar a planificar ese futuro y esos objetivos que tenemos pensado para nuestra organización. Es cierto que en los días que corren es muy complicado pensar tan a largo plazo, pero es un ejercicio que deberíamos hacer todos con nuestros negocios.
Ya sabemos que son muchos los detalles a tener en cuenta en este tipo de proyección financiera, y aquí nosotros debemos asesorarte sobre qué puntos deberíamos tener en cuenta para realizar este ejercicio, de momento te vamos a pedir que te fijes en unos pocos puntos clave que ya te van a otorgar una amplia visión estratégica: Gastos fijos mensuales, gastos variables estimados, personal, ingresos fijos mensuales (Por ejemplo cuotas de servicios o mantenimientos), previsión de ventas mensuales y el margen correspondiente a dichas ventas.
Evidentemente proyectar estos números implica tener un gran conocimiento de cada cuenta de tu negocio y eso es precisamente lo que buscamos realizando este ejercicio.
Gastos deducibles para tu actual negocio
Si a día de hoy no tienes claro que gastos son deducibles para la empresa que gestionas, no estás teniendo un buen flujo de comunicación con tu asesor. A estar alturas del negocio tu asesor y tú tenéis que tener muy claro que tipo de gastos podéis deduciros y conocer la tendencia de gastos fijos y variables. Ya sabes que el ahorro de costes es una de la palancas más importantes para el crecimiento financiero de tu organización y deberás centrar una parte de la conversación con tu asesor financiero para rentabilizar al máximo cada euro que inviertes en tu asesoría.
Calendario de impuestos anuales
En Asesoría Carbonell consideramos de vital importancia que nuestros clientes conozcan el calendario de impuestos organizado de manera anual y realizamos con ellos una planificación estratégica de como abordar estos pagos. Sabemos que los impuestos son una elemento importante de tensión de tesosería para una empresa y será clave para no ahogar la liquidez de la misma.
Aquí nos gusta recomendar dos opciones: Tener muy muy claro el calendario de pago de impuestos o crear una cuenta alternativa para guardar el importe de IVA correspondiente a cada factura y además ir separando el dinero de los impuestos previstos, para así no contar con ese capital que nos entra en la cuenta y tener un ahorrado para cuando llegue el correspondiente pago. De esta manera seremos todavía más conscientes de los impuestos que pagamos cada trimestre y a lo largo del año, para realizar los correspondientes ajustes financieros.
En este punto también debemos hablar con nuestro asesor, de manera abierta y constructiva, sobre como podemos hacer para pagar menos impuestos o quizás destinar ese capital en proyectos que se puedan revertir dentro del negocio, a modo de subvenciones, ayudas y descuentos. Hay más posibilidades de las que pensamos en este sentido y te sorprenderá saber la cantidad de dinero que podría ahorrar tu empresa con una buena planificación de impuestos.
Organización de la contratación y posibles subvenciones.
Esta claro que el objetivo de cualquier empresario o directivo de una empresa es tratar de que el personal se mantenga el mayor tiempo posible contratado. En estos momentos tan convulsos, debemos plantear distintas hipótesis para el crecimiento de nuestra plantilla ya poyadas por la anterior planificación financiera, que nos sirvan para prevenir la futura contratación de empleados.
Para ello tu asesor deberá informarte de todos los tipos de subvenciones para la contratación de que existen y que modalidades nos interesan más para salvaguardar los intereses del trabajador y de la empresa.
En esta apartado queremos compartirte un artículo titulado: Subvenciones del sector laboral y contrataciones, en el que hemos recopilado todas las posibilidades que comentábamos en el punto anterior.
Este es uno de los apartados que más nos sorprende como asesores, el desconocimiento y la tendencia que tienen los empresarios individuales en España a quedarse como (Autónomos) y no se plantean nunca, a lo largo de su vida laboral, en cambiar de denominación social a una que les convenga más a sus intereses económicos.
Como por ejemplo Sociedad Limitada, Sociedad Limitada Laboral, o Sociedad Cooperativa son algunas de las denominaciones que utilizan algunas empresas con grandes volúmenes de facturación y que se benefician de grandes ahorros fiscales.
Que realicemos este ejercicio de reflexión no significa que de buenas a primeras vayamos a cambiar la denominación social de tu negocio, pero sí debemos cuestionarnos todas las posibilidades de ahorro para tomar una decisión final en este sentido.
Y para concluir….
Pensamos que con estos cinco puntos comentados ya tienes bastante información sobre que deberías estar hablando con tu asesor para mejorar los resultados de tu negocio. Esperamos que está información resulte valiosa para ti y para tu empresa y si consideras que nos hemos dejado algún punto muy importante, contacto con nosotros y cuéntanos tu punto de vista. En Asesoría Carbonell estaremos encantados de poder ayudarte.
¡Muchas gracias por tu atención!